El pasado mes de marzo tuvimos la ocasión de asistir a la segunda etapa del Congreso Internacional del 250 Aniversario de la Fundación de las Nuevas Poblaciones de Sierra Morena y Andalucía. La programación de esta "fase B" del congreso nos llevó a visitar las localidades de La Carlota, Ochavillo del Río, San Sebastián de los Ballesteros, Fuente Carreteros, Fuente Palmera y Cañada Rosal. Durante estas visitas los asistentes fuimos muy bien recibidos por todos los ayuntamientos participantes en lugares simbólicos de cada pueblo, apreciamos la gastronomía típica local, recibimos regalos a cuenta de distintas instituciones, participamos en visitas culturales y asistimos a las conferencias-mesas redondas.
Fueron unos días cargados de actos protocolarios ineludibles que pusieron de manifiesto la buena voluntad de todas las instituciones participantes y colaboradoras en el congreso; actos que confortaron a los congresistas y participantes y que estrecharon lazos entre los mismos y les dieron la oportunidad de conocerse mejor (tuvimos la ocasión de conocer historiadores, cronistas y aficionados a la historia local que no conocíamos personalmente o de los que sólo teníamos contacto por email). 
Pero también fueron días donde distintos conferenciantes expusieron (brevemente, eso sí) sus últimos trabajos en la materia. Muchos fueron los que presentaron sus trabajos para el congreso,y sólo unos pocos los que pudieron exponerlos durante estos días; el resto aparecerán en las futuras actas del congreso que se publiquen a su debido tiempo. Como apasionados del tema de las Nuevas Poblaciones que somos, seguimos con atención la mayoría de las ponencias y descubrimos datos y perspectivas nuevos y diferentes a los habituales, datos poco conocidos que cambian algunos puntos de vista sobre nuestro pasado y que nos llamaron la atención y que vemos conveniente cristalizar en este artículo. Estas fueron algunas de esas conclusiones, a modo de apuntes, que personalmente nos aportó el congreso en esta, su segunda fase:
- Las danzas que se llevan a cabo en Fuente Carreteros el día 28 de diciembre también se bailaron en otras localidades como La Carlota, San Sebastián de los Ballesteros y Fuente Palmera en la provincia cordobesa; y en municipios sevillanos como Cañada Rosal y La Luisiana. En sus posibles orígenes se trataba de una danza ritual, no un baile como tal, inherente a la fiesta que se le asocia y que se llevaba a cabo en toda Europa (¿fiesta del Obispillo?). Entra en juego el concepto de aculturación o incluso sincretismo.
- El estilo arquitectónico que predomina en las iglesias carolinas de la campiña como Fuente Palmera o La Carlota es el barroco. Mientras, en las poblaciones de Sierra Morena estos edificios religiosos son más austeros, más sobrios. Por otro lado, la posición de la iglesia de Fuente Palmera en el centro de la plaza ha dado pie a muchos estudios e interpretaciones desde el punto de vista arquitectónico (urbanismo).
- Hay muchos estudios sobre la creación de las Nuevas Poblaciones, pero la etapa post-foral (tras 1835) es más desconocida y no está tan estudiada por cronistas e historiadores.
- Contrario a lo que se pensaba, los primeros colonos que llegaron a estas tierras de distintos puntos de Europa, no eran todos vagabundos, tullidos e iletrados, lo cual es un mito extendido. Más de un conferenciante apoyó con datos que algunos de estos colonos eran nobles, que muchos sabían leer y escribir llegando incluso a recogerse numerosas quejas al Estado Español (se requerían ciertos conocimientos para poder hacer llegar estas quejas); no sólo eran agricultores, sino que desempeñaban distintos empleos. Algunos, por ejemplo, eran buenos carpinteros, había organistas...
- Se ha estudiado poco la influencia de la música en las Nuevas Poblaciones, los nuevos trabajos de algunos conferenciantes abarcarán este aspecto. Se pensó en la doctrina en los colegios de estudios primarios con música (mejoraba aprender textos de memoria).
- En muchos libros no suele quedar constancia del sufrimiento y desgracia en la que cayeron los primeros colonos. Los colonos que vinieron lo hacían a título individual en algunos casos, no en comunidades, por lo que eran muchas las situaciones personales. En otras ocasiones emigraban en grupo, eran vecinos de la misma aldea.
- Muchos de los colonos que emigraron a tierras de las Nuevas Poblaciones estaban en deplorable situación económica, pero otros no estaban desprovistos del todo de propiedades: tenían casas, eran buenos trabajadores, etc. Buscaban salvar sus deudas que superaban en algunos casos sus bienes en pago, buscaban prosperidad.
- El bandolerismo no tuvo por qué ser el principal motivo de la colonización, puesto que tuvo su mayor apogeo (s. XIX) en un momento después a la creación de las Nuevas Poblaciones (s. XVIII).
- Desde el punto de vista del urbanismo la colonización fue un éxito puesto que las poblaciones perduran, se implantaron. Puede tratarse de la primera o una de las primeras veces que se planificó el territorio en España a la escala en que se hizo.
- Otro mito que debe quedare en el pasado es el de las zonas desérticas en las que se situaban poblaciones como La Carlota, Fuente Palmera o La Luisiana; realmente estas zonas tienen una historia de asentamientos humanos anteriores a la colonización de Carlos III. Hay hallazgos de época romana, inscripciones y documentación que los nuevos investigadores aportan y que ratifican esta idea. Los hallazgos últimos de la zona de Ochavillo del Río lo atestiguan. Fuente Palmera tenía carácter agrario; están cercanos los yacimientos arqueológicos de alfarería para aceite. De época visigoda/islámica hay evidencias aparecidas en La Carlota. En la Baja Edad Media había distintos caseríos, cortijos, ventas, etc.
